El término literario “Bildungsroman” viene del alemán bildung (aprendizaje, formación) y roman (novela). Las llamadas “novelas de formación” presentan el proceso de maduración del protagonista a través de sus páginas. Fue acuñado por el filólogo alemán Johann Karl Morgestern en 1819. Charles Dickens, Jack London, y Rudyard Kipling son algunos de los máximos precursores de este tipo de novela.
Si nos vamos al siglo XX, quizás el mayor ejemplo de Bildungsroman sea Matar a un Ruiseñor. Harper Lee siempre tuvo la intención de que su obra maestra fuera el viaje de autorrealización y maduración de Scout, la niña protagonista. El tema central de la novela es la pérdida de la inocencia. Y hace lógica: El ruiseñor es un ave, asociada con imágenes placenteras de nuestra infancia; mismas imágenes que con la maduración mental y emocional se ven reemplazadas por el cinismo de la juventud y la adultez. Scout irá poco a poco perdiendo su inocencia al aprender más sobre el funcionamiento del mundo y la naturaleza dual del ser humano. Este libro está bombardeado por imágenes de los prejuicios, el rechazo hacia lo diferente, y lo triste sobre un sistema social y judicial sin oportunidades iguales para todos. Y, por mucho que no nos guste, ese es un viaje de maduración emocional por el que todos debemos atravesar. Todos debemos hacer esa transición de la ingenuidad infantil al saludable escepticismo característico de la edad adulta.
Y este libro retrata esa transición como ningún otro título ni ninguna otra autora pudo haberlo hecho.
Autora: Harper Lee
Traducción original: Bruguera
Editorial: Harper Collins Publishers
Disponible en: El Sótano
Precio: $249
Como siempre que te leo, aprendo algo. Gracias!